Los senadores nacionales trataron durante la sesión de este jueves el polémico proyecto de ley contra todo tipo de discriminación.
Entre los que hicieron uso de palabra figuró el congresista Arnoldo Wiens (ANR), quien comentó que “se nace hombre o mujer y nada más”.
Wienz además aprovechó la ocasión para leer la condena que está escrita en el Levítico contra los homosexuales. “En la Biblia dice que no te echarás con varón como si fuese mujer. Alguien puede sentirse discriminado por esto”, aseveró.
Por su parte, Eduardo Petta (PEN) consideró que el proyecto de ley atenta directamente contra la familia, ya que indicó que impulsará las uniones entre gais. “No solo atenta contra principios constitucionales sino también principios ideológicos y religiosos”, agregó.
Aseguró que con el texto se otorgan “superpoderes” a sectores minoritarios y se violan las disposiciones del Ministerio Público.
“El Papa Francisco dice que Dios ama al pecador y aborrece el pecado. El Papa tiene misericordia del pecador pero rechaza el pecado”, aclaró en relación a la “apertura” que demuestra la Iglesia Católica. DIVORCIO, VOTO DE MUJER, ETC.
Para aclarar algunos puntos, el senador Hugo Richer (FG) dijo que el documento tratado no plantea en ninguno de sus puntos que se legalice el aborto ni el matrimonio gay.
Mientras que Adolfo Ferreiro (AP) recordó que la ley del divorcio tuvo el mismo tratamiento hace dos décadas. “La Iglesia hasta sacó un comunicado donde decía que el Estado no tenía potestad a legislar sobre algo religioso. Todo la confrontación ocurrió, pero igual se aprobó”, indicó. Agregó: “algunos decían que el divorcio traía consigo el fin de las familias”.
El parlamentario dijo que mismo caso se registró cuando se analizó el voto de la mujer, las ocho horas laborales, la violencia doméstica y los derechos del menor.
“Especulamos en consecuencias a futuro. Dicen ‘con esta ley vendrá tal o cual ley’. Con ese criterio íbamos a darle la razón a los que en su momento dijeron que con las 8 horas iba a venir el comunismo. Tenemos que entender que estamos legislando hoy una ley contra discriminación”, dijo a sus colegas.
LOS 108 NO ME QUIEREN
Por su parte, Carlos Núñez (ANR) señaló que hay que ser realistas, hay que hablar de frente, y añadió que este proyecto dará pie a otros que plantearán la unión gay. “Por eso los 108 no me quieren, yo hoy fui víctima de ellos cuando llegaba al Parlamento, me gritaron de todo”, dijo.
“Yo también soy cristiano, padre de familia y el día de mañana quiero que mis hijos sean educados como varón y mujeres. ¿Quién no quiere así su familia? Respetemos a las familias”, agregó el colorado.
Ante la risa de sus colegas, pidió que la votación sea realizada en forma nominal para que se sepa quiénes son los parlamentarios antigay.
Recordó que cuando protegieron los fueros parlamentarios de su colega Víctor Bogado los congresistas “fuimos discriminados porque nos cerraron las puertas los locales, entonces ahora vamos a discriminar también nosotros”. Agregó: “para congraciarnos con la sociedad ahora tenemos que aprobar una ley injusta”.
Siguiendo con la misma línea de pensamiento, José Manuel Bóveda (Unace) rechazó el proyecto de ley porque los proyectistas no explicaron cuáles son los alcances verdaderos. “¿Qué es el género? ¿a qué se refieren cuando hablamos de género? Pedí a los proyectistas que se aclare, porque nadie aclaró los puntos. Acá no se define que la identidad de género consiste en el hombre y la mujer”, lamentó.
Consideró que no se puede discriminar a los “mariconcitos y marimachos”. Añadió: “acaso no sabemos de varones con costumbres femeniles, por eso en la escuela le llamábamos mariquita. Eso no es digno de discriminarlos de los llamados gay, transexuales y los otros 27 géneros”.
“El amor es la culminación del sentimiento máximo y el acto sexual. Hasta el sapo tiene su corazoncito. Esto es muy importante. No podemos discriminar a una niña que desde el colegio se viste como nene, o un nene que le guste jugar con las muñecas”, comentó.
No obstante, lamentó que en este documento “viene encubierto el matrimonio entre personas del mismo sexo”.
El colorado Luis Castiglioni alertó que la humanidad tiene futuro únicamente si se rechaza el proyecto porque el texto afecta la vida, la familia y la propiedad. “Defiendo el libre albedrío de la gente. Estoy en contra de penalizar. Eso sería ser intolerante. Veo en este proyecto de ley un intento de regimentar el pensamiento”, consideró.
La senadora Esperanza Martínez (FG) lamentó que la religión confunde el sexo y la sexualidad con la reproducción. En ese sentido preguntó a sus colegas que si tienen solo ocho hijos, entonces solo esas veces mantendrán relaciones sexuales. “Hay mujeres que tienen ovarios y vagina, pero también un pene. Eso es algo biológico. Me ofrezco a los colegas para explicarles cómo es la situación”, agregó.
Fuente: hoy.com.py
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