
LIMA.-La anunciada mano dura para ordenar el tránsito y modernizar el transporte no parece haber servido de mucho a la alcaldesa Susana Villarán en el intento de revertir la opinión negativa que un sector de los limeños tiene hacia su gestión.
Según la última encuesta elaborada por Ipsos Apoyo para El Comercio, el nivel de desaprobación de Villarán se mantiene en 60%, cifra idéntica a la de julio, cuando afrontó un paro de transportistas tras informar que sacaría de circulación a las combis y vehículos viejos.
En tanto, el porcentaje de aprobación hacia la alcaldesa llega al 26%, tres puntos más que el mes anterior, pues el número de indecisos se redujo e inclinó este rubro a su favor.
El descontento hacia la actual gestión edilicia se ha ido incrementando con el paso de los meses, pues, tras asumir el cargo con una desaprobación del 21%, según un sondeo de enero de la PUCP, los datos de Ipsos Apoyo muestran que en marzo esta alcanzaba el 47%; y en junio, 54%.
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