El tiempo de los plazos, indicó Urbina, son el primero en 72 horas, el segundo en 48, y el último y definitivo en 24 horas. Los plazos contabilizados en días hacen un total de seis.
Ante esta circunstancia, Antonio Salazar, procurador de la Municipalidad de Lima, dijo que un pedido de destitución tiene que tener como fundamento el desacato a un mandato de la autoridad y que ese no es el caso de Villarán de la Puente, ya que aseguró, solicitó un plazo ampliatorio para el retiro de los muros de contención como se indicaba en la resolución del caso La Parada.
Lo que no supo explicar ante las preguntas de la prensa, es si el plazo de ampliación le fue concedido de forma expresa para poder probarlo documentariamente.
Urbina defendió su oposición respecto a la destitución de Villarán. “Ella no ha hecho caso a las reiteradas notificaciones para que retire los bloques de cemento. Como no ha retirado, no había salida posible sino la de ordenar la destitución de la alcaldesa, conforme a ley, así lo manda el artículo octavo del código procesal constitucional”.
Pero con lo revelado por Urbina, el que llevó quizás la peor parte fue el ministro del Interior, Wilfredo Pedraza, quien calificó la labor del magistrado de “desprestigiar la carrera del juez”.
“El ministro del Interior es mentiroso e inepto. Cómo es posible que conteste ante el interrogatorio del juez que él no sabe nada. Cómo es posible que ante la prensa diga que no sabía nada. Cómo es posible que un ministro diga eso”, revelando parte de la explicación del ministro, ante la investigación del operativo de desalojo, tan mal organizado, que se puso en peligro la vida de los policías.
Fuente: La Razón
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