El “Debate Justo sobre el Proyecto de Despenalización del Aborto en casos de violación”. contó exclusivamente con ponentes abortistas, entre los cuales destacó, la legisladora Verónika Mendoza. La parcialización de los organizadores generó la indignación de los presentes, que interrumpieron la ponencia. Una de las principales voces fue de la valiente intervención de la regidora del distrito Flor de María León.
“Como mujer me siento tan indignada y, sobretodo, con mucha tristeza de que se unan para intentar aprobar esta ley que es un crimen, un asesinato a un ser indefenso que no tiene voz para poder defenderse. ¿Quién es la víctima? hay dos víctimas acá: Primero la madre y segunda víctima, el bebé. ¿a quién tenemos que acusar, al bebé? ¿el bebé tiene que pagar?”, manifestó la regidora en el evento.
Así mismo, atestiguo que en los centros de salud llegan jóvenes que vienen después de haber abortado vienen deprimidas, a punto de suicidio, arrepentidas de suicidarse.
pero, a los organizadores del evento no toleraban la posición contraria de la regidora y le desconectaron el micrófono y un grupo de activistas feministas no dejaron de gritar para evitar que la regidora pueda seguir dando su punto de vista.
“Aborto sí, aborto no, eso lo decido yo”, fue el coro que repitieron las feministas de género.
La regidora manifestó después del evento que “esto no ha sido un debate justo, porque su hubiera sido justo hubieran estado las dos partes: Uno de los que están a favor y dos, de los que están en contra para que ustedes puedan sacar sus conclusiones, no se dejen engañar… si ese bebé fuera mujer ¿no tendría derechos?”
También denunció que la frase “Déjala Decidir” es “una palabra camuflada del aborto. el aborto realmente es un asesinato. además va contra la constitución, contra la ley”.
Consideró una falta de respeto que se le haya retirado agresivamente de la sala, con gritos y quitándole el micrófono.
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