El abogado debe comprender que cualquiera de los dos abogados que hemos quedado [la otra es María Elena Portocarrero] para la justa amistosa del sábado 9 de diciembre, puede hacer un buen papel. Quiero enfatizar que yo no soy un activista contra los ‘caviares’, solo los combatí porque me vi obligado. El activismo es pernicioso porque nos lleva al fanatismo y no nos dirige a ninguna parte.
-El ministro del Interior, Carlos Basombrío, se quejó de que la Fiscalía no les dio prisión preventiva a los presuntos criminales de Villa María del Triunfo. ¿Qué papel tendría el CAL en ese escenario?
El Colegio de Abogados de Lima tiene que estar vigilante de los hechos. El Ministerio Público no es policía, es autónomo respecto a la PNP. En consecuencia, el Ministerio Público no puede estar de mascota del Mininter, como viene pasando con el ministro Carlos Basombrío. Hay titulares de la Corte Suprema que no están actuando como jueces, sino como activistas. El Consejo Nacional de la Magistratura (CNM) tiene que anticipar eso y el CAL pedirá las reformas necesarias en su tiempo.
-Algunos políticos, denominados “caviares”, se inmolaron como defensores de la moral y lo han criticado. ¿Cuál sería su respuesta?
Llevo casi 15 años enfrentando a los “caviares” porque antes no los conocía mayormente. Me parecían que hablaban cosas buenas, era imposible enfrentarse a un caviar porque quién se puede enfrentar a una persona que lucha contra la corrupción o defiende los derechos humanos; nadie.
-Pero se dio cuenta que no era así…
Me di cuenta que eran falsos y a los jueces que no resolvían como ellos querían los aniquilaban y estigmatizaban. Algunos jueces, quienes son unos sinvergüenzas y tramposos, que estaban con ellos, no los tocaban. También me di cuenta de que era una cofradía de cínicos y decidí enfrentarlos, porque en el peor de los casos me podrían atacar, pero no destruir. Los enfrenté hace más de 15 años, cuando ellos estaban en la cúspide del prestigio, venían de la Comisión de la Verdad, hacían alarde de la ética y transparencia. Pero descubrimos que son transparentes como el petróleo y que, si ellos son éticos, yo soy virgen. En consecuencia, se han venido abajo. Han estado en la corrupción y vienen de gobiernos anteriores porque son cazadores de puestos, son parásitos. Otros, los pretendidos luchadores de los derechos humanos, terminaron como encubridores de algún presidente que está con problemas en materia de derechos humanos. A cambio de colocaciones en el Sistema Interamericano, Sistema de Organización de Estado Americano, Naciones Unidas, entre otros.
-¿Qué opinión le merece que algunos “caviares” estén como funcionarios de este gobierno?
Lamentablemente, el Presidente de la República [Kuczynski] está de lado de los caviares, algo les debe. Pero, no comprendo por qué el señor Presidente está en esa posición. Hay una exprocuradora [Yeni Vilcatoma] que ha pedido su renuncia y la Constitución no impide la renuncia del Presidente si es conveniente. Yo no he pedido la renuncia, pero sí creo que debe enfrentar a la Comisión Lava Jato. Si no tiene nada que temer, tiene que presentarse con la energía del caso.
“NO ME GUSTA PERSEGUIR A MIS OPOSITORES”
-Sus opositores lo han vinculado al fujimorismo. ¿Qué puede decir al respecto?
Jamás trabajé con el señor Fujimori. No sé de dónde han sacado que soy fujimorista, solo porque me niego rotundamente a perseguirlos como juez y ciudadano. Tengo un libro extenso, lleno de papelitos rosados, donde figuran las personas que han trabajado con Alberto Fujimori, y ahora me dicen fujimorista, como Diego Sayán, Sánchez Moreno. No me gusta perseguir, no está en mi ADN.
Expreso
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