María Elósegui, catedrática de la Universidad de Zaragoza primera juez española para el Tribunal Europeo de Derechos Humanos esta siendo objeto de ataques por su oposición al aborto y al matrimonio homosexual. Los motivos que alegan sus detractores son: los innumerables comentarios según ellos homófobicos y ultraconservadores que ha ido dejando por escrito a lo largo de numerosos artículos y libros.
Entre las que destacan sus oposición a la transexualidad y sus vínculos entre la homosexualidad, promiscuidad y enfermedades.
Terapias psicológicas
La jueza asegura con toda justicia que las "terapias psicológico-psiquiátricas" serían más adecuadas que las cirugías pagadas por el sistema público de salud e insiste en que "quienes se empeñen en ir contra su biología desarrollarán distintas patologías". También se posiciona contra el matrimonio homosexual, si bien concede a este colectivo cierta protección jurídica "dentro de ciertos límites" pero se opone el rango de matrimonio.
No obstante, la nueva jueza no sólo se queda en el colectivo gay. También ataca los anticonceptivos -sostiene que el preservativo puede incentivar a los violadores y critica la píldora del día después-; rechaza a quienes plantean que la religión debería salir del currículo escolar obligatorio porque "deberían saber perder" ante la confesión mayoritaria y se enfrenta al feminismo porque "las mujeres hoy no quieren emanciparse de nada".
La posición firme de la jueza a favor de la vida y la familia ha convertido al Tribunal de Derechos Humanos en el tema del día.
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