El evento, promovido por la comunidad LGBT, está en su 18ª edición. La alcaldía no permitió que se realizara en la plaza Dante Alighieri, donde normalmente ocurre. En una nota, la secretaría de Cultura de Caxias, informó que “en la fecha solicitada para la realización del evento, el perímetro de la plaza Dante Alighieri, que tradicionalmente recibe la Parada, estará ocupado por maquinaria y obreros que trabajarán en el montaje de la estructura y cableado eléctrico para la Navidad “.
Sin el apoyo del poder público, la organización de la Parada decidió alquilar por un aparcamiento privado donde pudiera realizar el evento. Sin embargo, gatito virtual no planteó siquiera la mitad de la cantidad requerida.
El alcalde Guerra está siendo tachado de “homofóbico” y comparado con Jair Bolsonaro, a quien declaró apoyo en esas elecciones. La ira de los activistas LGBT creció después de que la Guerra había participado de la Marcha para Jesús, que tuvo lugar el día 15, en el mismo lugar solicitado por ellos. Aunque no se declare evangélico, el prefecto es conservador y tiene afinidades con el segmento, además de pertenecer al PRB, ligado a la Iglesia Universal.
Sandro Silva, uno de los organizadores de la “Parada Libre” fue enfático: “Yo no veo cuestión de prejuicio, veo persecución y una total falta de visión sobre lo que es el movimiento LGBT” se quejó.
AgenciaLaVoz
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