INGLATERRA.- El alza de las instituciones e incluso iglesias de otras denominaciones en favor de la ideología de género en los niños ha causado un gran malestar en los padres de estudiantes en Inglaterra por dejarles afirmar ser transgénero, aun cuando su edad no les permita entender tal título.
Dos padres cristianos en la ciudad de Inglaterra están exigiendo a la Iglesia de Inglaterra que haga cambios en su guía enviada a 4.700 escuelas primarias, en las que se les permite a los niños hasta los cinco años puedan afirmar que no están de acuerdo con su género.
A nombre de Nigel y Sally Rowe, fue enviada una carta abierta al arzobispo de Canterbury. La cual pide una revisión para saber el porqué de la inclusión de tal ordenanza dentro del programa “Valorar a todos los niños de Dios”.
«La enseñanza cristiana básica es que todos somos creados hombre o mujer y que las diferencias entre los sexos son hermosas, diseñadas y complementarias, y deben ser respetadas en la sociedad. Todos somos creados hombre y mujer», escribieron ambos.
Por tal petición, los padres y su hijo fueron etiquetados por la escuela como “comportamiento transfóbico” luego de que el pequeño mostrara “angustia y molestia” después de decirle que llamara a sus compañeros por sus pronombres preferidos.
Por tal acusación, la pareja retiró a su hijo de dicha institución, y le pidieron al Departamento de Educación que brinde una guía clara “sobre como las escuelas deben manejar a los alumnos que desean identificarse como del sexo opuesto”, ya que las leyes le prohíbe a los ciudadanos cambiar legalmente su género hasta la edad de 18 años.
“También nos preocupaban los efectos nocivos en los niños a los que se les permitió la transición social, así como los efectos en todos los demás niños de la escuela”, especificó la pareja en la carta, además de presentar un extenso estudio al Departamento de Educación donde demuestran que las políticas trans conllevan a resultados catastróficos para los niños y la confusión con su género.
En un principio tal departamento se negó a revisar las pruebas, pero cuando los Rowe decidieron llevar el caso hasta instancias judiciales, la escuela cambió su política.
«El problema es que muchas escuelas y maestros creen, incorrectamente, que tienen la obligación legal absoluta de tratar a los niños que cuestionan el género de acuerdo con sus preferencias, en todas las formas y todos los aspectos, desde los pronombres preferidos hasta el uso de las instalaciones y competir en deportes. A veces, todo esto ocurre sin informar a sus padres o sin tener en cuenta el impacto en otros niños. Cualquiera que cuestione este enfoque es acusado de transfobia. En mi opinión, este enfoque no está respaldado por la ley», dijo la exfiscal general Suella Braverman sobre el cambio de las puestas.
Tras el cambio, los padres cristianos ganaron más de $23.900 en costos legales y el compromiso del gobierno británico para reformar las políticas de “afirmación trans” dentro de las escuelas; los Rowe ahora están enfocados en que la iglesia de Inglaterra pueda ver este aspecto.
«Es evidente que ‘Valorar a todos los hijos de Dios’ falla por completo en abordar los pasos importantes que se requieren para salvaguardar a los niños como lo describe el Fiscal General. Está claro que Valuing All God’s Children debe desecharse», dijeron ellos.
«Estamos seguros de que estarán de acuerdo en que la seguridad y el bienestar de todos los hijos de Dios a quienes se enseña en las escuelas de la Iglesia de Inglaterra es un asunto de suma importancia», agregaron.
Incluso sus representantes legales coincidieron en que la postura de la iglesia es dañina para los niños, debido a la responsabilidad que conlleva la situación.
«La Iglesia de Inglaterra, que tiene más de un millón de niños bajo su cuidado, respaldó el enfoque de la escuela en el caso de Rowes. ‘Valorando a todos los niños de Dios’ ahora debe descartarse a la luz de este resultado y la abrumadora evidencia de que la Iglesia está apoyando el daño», finalizaron.
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