COSTA RICA.- Durante una reciente entrevista, el presidente de Costa Rica, Rodrigo Chaves, advirtió que su país podría retirarse de la conveción de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) si la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte-IDH) falla en encontra del estado de El Salvador en el “caso Beatriz”, en lo que consideró sería una manera de favorecer a la causa abortista internacional impulsada por ONG’s y diversas organizaciones afines.
Según manifestó Chaves, mandatario en cuyo país precisamente se encuentra la sede de la Corte-IDH (San José, Costa Rica), si el fallo es negativo para los intereses nacionales y soberanos de El Salvador, “Costa Rica no tiene ninguna opción más que salirse del tratado”, por lo que dispondría rechazar la aceptación de la competencia contenciosa que le había dado a la Corte, por la cual determina si un Estado ha incurrido en responsabilidad internacional por la violación de alguno de los derechos consagrados en la Convención Americana sobre Derechos Humanos y en otros tratados aplicables al Sistema Interamericano.
Las expresiones del presidente Chaves se dieron a vísperas de que la Corte-IDH emita un fallo en el caso “Beatriz vs. El Salvador”, que se remonta al año 2013, el cual podría sentar un hito sin precedentes para toda la región respecto a la legislación en materia de la despenalización del aborto.
Caso Beatriz
En el año 2013, Beatriz, una joven de 21 años, denunció ante el Sistema Interamericano de Derechos Humanos (SIDH) al Estado de El Salvador por haberle impedido bajo todo tipo de circunstancia acceder a un aborto terapéutico, esto pese a que, a las 13 semanas de gestación, le fue diagnosticado que padecía lupus, fuertes daños renales y artritis. Asimismo, los médicos también le indicaron que cargaba en el vientre con un feto que se desarrollaba sin cráneo ni cerebro, con una malformación incompatible con la vida.
Tras ello, la joven salvadoreña denunció a El Salvador a inicios de 2013 ante la Corte Interamericana y, en mayo de ese mismo año, 13 semanas después de la petición de Beatriz, dicha instancia internacional instó al el estado salvadoreño acabar con el embarazo que ponía en riesgo la vida de la mujer.
El Estado accedió entonces finalmente a practicar una cesárea para retirar el feto, el cual falleció a las cinco horas tras la intervención. Por su parte, la salud de Beatriz quedó sumamente debilitada y fallecería cuatro años después en un accidente de motocicleta.
Aun con la desaparición física de Beatriz, su caso continuó adelante en la Corte-IDH, respaldado por organizaciones feministas y las siempre lucrativas y convenientes ONG’s de derechos humanos.
Posible fallo en contra
Todo parece indicar que el fallo que emita la Corte-IDH será en condena de El Salvador, como lo hizo presagiar el informe de fondo elaborado por la CIDH en la que concluyó que el Estado salvadoreño es responsable por la violación de los derechos a la vida, integridad personal, garantías judiciales, vida privada, igualdad ante la ley, protección judicial, y derecho a la salud.
“Solo una razón puedo yo, en mi fuero interno, considerar válida para ejecutar un aborto.Estamos analizando con mucho cuidado, porque esto es ajedrez de las grandes ligas”, dijo el presidente de Costa Rica sobre el próximo falló de la Corte-IDH en el caso Beatriz. Chaves también reconoció la existencia de un lobby internacional interesado en políticas abortivas.
>br> De esta manera, el presidente Rodrigo Chaves reafirmó la postura de Costa Rica en defensa de las leyes nacionales y tratados internacionales firmados por su país que defienden la vida desde la concepción.
De la misma manera, si la Corte-IDH falla en contra de El Salvador por el caso Beatriz acentuará el cuestionamiento sobre la legitimidad de dicha instancia internacional a raíz de su creciente tendencia a producir sentencias cada vez más cuestionadas.
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