BRASIL.- ( AGENCIALAVOZ.ORG ) Con las elecciones del 3 de octubre, el bloque de diputados evangélicos, que tienen como bandera de lucha principalmente la oposición al aborto, creció en un 47% y se convirtió en la tercera mayor bancada del Congreso, superando al Partido de la Social Democracia de Brasil del candidato presidencial José Serra.
A partir del primero de febrero, cuando toman posesión los nuevos congresistas, la Cámara de Diputados contará con 64 representantes de iglesias evangélicas, los cuales se presentaron como candidatos de diversos partidos, según destacó ayer el diario Valor Económico.
Diecinueve diputados evangélicos pertenecen a la Asamblea de Dios, la corriente neopentecostal más popular del país y que tiene entre sus fieles a la candidata presidencial Marina Silva, del Partido Verde, que obtuvo 20 millones de votos (el 19% de las preferencias), que hoy están siendo disputados por la oficialista Dilma Rousseff y el opositor José Serra. El tercer grupo evangélico con más miembros, 8 diputados, está ligado a la Iglesia Universal del Reino de Dios, propietaria de la red de televisión y radio Record, una de las de mayor audiencia del país.
En tanto, esta bancada evangélica también incluye a tres senadores.
Un informe del Departamento Intersindical de Asesoramiento Parlamentario (Diap, independiente) reconoce que los evangélicos son muy activos en el Legislativo. Y pese a pertenecer a varias agrupaciones los congresistas evangélicos actúan presumiblemente de forma coordinada cuando se trata de temas como el aborto,matrimonio gays o la libertad religiosa.
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